En el motel Pink coinciden los más disparatados personajes: Lillian, que espera la llegada de su novio, pero, inexplicablemente, se despierta junto a un desconocido llamado Luke. Éste le asegura que es ella quien se encuentra en la habitación equivocada. Lillian llama al encargado del motel, que no le presta mucha atención porque está discutiendo con su hija Ramona, que está enamorada de un "gringo". También se alojan en el motel Constance, una mujer decidida a casarse con un médico, con cualquier médico, y un violinista ruso que no deja dormir a nadie.